En este artículo se analizó la efectividad de un programa de 6 meses de un protocolo de ejercicios diario, en pacientes con hombro doloroso que tienen que usar la silla de ruedas habitualmente en su vida.
Los sujetos que participaron en el estudio tenían diferentes lesiones que provocan el uso de la silla: medular, pospolio, amputados y parálisis cerebral; y ninguno de ellos parece ser deportista.
No hacen distinción entre hombres y mujeres, el promedio de edad son 35 años, y uso de la silla de ruedas durante promedio de 14 años.
Se hicieron dos grupos, uno de control y otro que hacía los ejercicios, y la conclusión, después de varias mediciones, y salvando las limitaciones del estudio, es que en el grupo que siguió el protocolo, disminuye la puntuación en el test de medida de ese dolor, y como influye negativamente en su vida diaria (PC-WUSPI) en un promedio de 39.9%, comparado con el descenso del 2.5% en el grupo de control (no siguió el programa) .
Una vez más el ejercicio bien pautado demuestra ser eficaz en dolor de larga duración.